29/03/2025

¿Memoria democrática o amnesia selectiva?

Por Pedro Lechuga Mallo

En poco más de una década se cumplirá un siglo de uno de los episodios más tristes de la historia reciente de nuestro país. Cualquier conflicto bélico provoca un dolor y sufrimiento incalculable, pero este se multiplica exponencialmente cuando hablamos de una guerra civil. Las heridas que dejan este tipo de confrontaciones curan muy lentamente y no siempre acaban de cicatrizar correctamente, lo que puede incitar a repetir errores pasados.

Gran parte de nuestra clase política ha utilizado y utiliza la Guerra Civil para despellejarse y saldar cuentas pendientes, convirtiendo este episodio tan nefasto en un arma arrojadiza más. Pero el motivo por el que hoy reflexiono sobre este asunto no es un exabrupto de algún político, sino la última película de Julio Medem, que tuve la suerte de ver y disfrutar esta semana.

Dejando a un lado la vertiente más artística del filme ‘8’, que según mi humilde opinión también es reseñable, quiero centrarme en la línea argumental de este trabajo cinematográfico y de los múltiples debates y reflexiones que regala al espectador. Antes de continuar con mi exposición avisarles de que no se preocupen, no voy a hacer spoiler, así que pueden seguir leyendo sin miedo a ver destripada la historia protagonizada por Javier Rey y Ana Rujas.

Lee aquí el artículo completo publicado en La Nueva Crónica.